Domingo ( Microtexto)
Todo se podría definir como un anochecer de Domingo , nada presagiaba el sonido de pies descalzos ni la certeza amarrada de ausencia...Solo el ventanal y el balcón incitando vuelos.
Uno puede vivir, seguir viviendo un domingo en la tarde, sin rosas, apretando un nombre entre las rodillas, con el agridulce sabor de la cama en desorden.
Los Domingos son peligrosos, tentadores..huelen a desastre de guerra, a mordiscos en la boca, a yerba amarga. .
Memorizan las pupilas los números rojos del calendario y el ruido de cristales lo hace eterno, asesinando lunes.
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