Te llamabas memoria
Te llamabas memoria
para despertarme
al filo de la madrugada
con tu desnudo de cenizas.
Y amandote en el olvido
recobramos las horas,
los idiomas y las manos.
Te llamabas memoria
hasta el último gemido
que ausentó tu nombre.
Te llamabas memoria
para despertarme
al filo de la madrugada
con tu desnudo de cenizas.
Y amandote en el olvido
recobramos las horas,
los idiomas y las manos.
Te llamabas memoria
hasta el último gemido
que ausentó tu nombre.
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